[MÚSICA] Cada día se dan millones de conversaciones en el mundo y cada una de ellas cuenta con un contexto concreto que les da sentido. No significa lo mismo manos arriba en un gimnasio que en una jefatura de policía. Cuando decimos contexto no nos referimos a un mero lugar físico sino a ese espacio que nos permite comportarnos de una forma determinada y que va acorde con el tipo de conversación que mantendremos. Cada contexto facilita un tipo de comunicación determinada y limita los comportamientos que tienen sentido dentro del mismo. Las mismas personas tendremos comportamientos diferentes en una iglesia o en un campo de fútbol. En la empresa familiar es necesario tener diferentes tipos de conversaciones. Unas conversaciones relacionadas con la familia propietaria, otras con la propiedad, otras con la estrategia de la empresa y otras relacionadas con la gestión de la empresa. Para que cada una de estas conversaciones funcione necesita un contexto determinado que al ser creado y aceptado se produce una institucionalización de dichos contextos. No tiene sentido hablar de cuestiones de familia, por ejemplo quién heredará acciones cuando muera el abuelo, cuando se trata de decidir aspectos del día a día, por ejemplo un cambio de proveedor. Se estarían mezclando temas que poco tienen que ver y se perturbaría y retrasaría la decisión final. El contexto directivo es un contexto de decisiones rápidas y cambiantes. Hay estudios que indican que un directivo dedica a cada tema poco más de 10 minutos y tiene oportunidad de dedicarle media hora seguida a un tema una vez cada 3 días. ¿Es este el contexto en el que un hijo debe conversar con su padre sobre si es bueno incorporarse a la empresa familiar? O quizás requiere de un contexto más reflexivo. Las conversaciones que tienen que ver con la familia propietaria y con la propiedad psicológica, explicaremos este concepto en próximos vídeos, requieren del consejo de familia. Las conversaciones que tienen que ver con la propiedad jurídica tienen su espacio. Este espacio es la junta general de accionistas. En la medida en que predomine la propiedad psicológica, este espacio será relativamente ceremonial y absorbido por el consejo de familia. Las conversaciones que tienen que ver con la estrategia y el desarrollo de la compañía requieren del consejo de administración. Las conversaciones que tienen que ver con la gestión de la empresa requieren del comité de dirección. Todas las empresas familiares necesitan estas conversaciones y, por lo tanto, todas necesitan estos diferentes contextos conversacionales. Otro tema es el nivel de desarrollo, es decir, el nivel de funcionalidad que deben tener. Esto dependerá de la complejidad de la empresa y de la complejidad de la familia. En próximas unidades veremos qué características los hacen funcionales. Utilizaremos el término institucionalización y no simplemente estructura de gobierno porque una cosa es tener los órganos de gobierno y otra cosa es que estén institucionalizados. ¿Qué significa institucionalizar? Significa que el grupo de personas le dan un valor determinado, le dan una presencia y le dan un significado. Así, un consejo de administración puede ser una simple ceremonia de reunión o puede ser visto por los directivos y por la familia como un elemento central de la empresa familiar. Un proceso de institucionalización puede ser tan potente que puede llegar a dar carta de naturaleza a realidades inexistentes. Todo nos emocionamos en Navidad con Papá Noel que es una realidad institucionalizada a pesar de ser puramente imaginaria. En esto consiste la institucionalización de los órganos de gobierno, de dotar de vida a un sistema de gobierno que se quiere desarrollar. Para situarnos mejor vamos a volver al ejemplo de RACE. Recordemos que Joaquín tenía 3 hijos, Elena, Pablo y Javier. Los 3 son hijos del fundador y accionistas pero Elena y Javier trabajan en la empresa y Pablo no. La estructuración de los órganos de gobierno permite diferenciar el rol que debe jugar cada uno de ellos en cada conversación. En el consejo de familia, la familia propietaria está compuesta por los padres y los 3 hermanos, por lo que tiene sentido que sean ellos 5 los que conformen el consejo de familia. En el consejo de administración, aunque Joaquín you no dirige la empresa tiene un gran conocimiento y experiencia que puede ser importante para orientar la compañía hacia el futuro, por lo tanto, debería estar sentado junto a Javier y quizás Elena. En cambio Pablo, al no estar orientado hacia la gestión, no tiene que estar en el consejo de administración. Es probable además que en este espacio requieran de 2 consejeros externos que les ayuden a tomar las decisiones más adecuadas. El comité de dirección es un espacio en el que debe de estar Javier y su equipo directivo, del que Elena forma parte. En las próximas sesiones profundizaremos en cada uno de estos órganos de gobierno. [MÚSICA] [AUDIO EN BLANCO]